
Las dietas de pérdida de peso y los frutos secos se han considerado durante mucho tiempo como incompatibles. Son alimentos altamente densos en nutrientes, muy ricos en proteínas y llenos de beneficios saludables. Sin embargo, también son calóricos y abundantes en grasas, lo que los coloca al margen de la alimentación hipocalórica. Un nuevo estudio a cargo de la Universidad de Australia del Sur zanja ahora la controversia, corroborando que se pueden consumir almendras y perder peso al mismo tiempo.
Un amplio estudio ha demostrado que, incluso en el contexto de una dieta de restricción energética, incluir una ración de almendras no solo ayuda a perder peso, sino que mejora su salud cardio metabólica. Tras examinar los efectos de la suplementación tanto con los frutos secos como con aperitivos ricos en carbohidratos, los investigadores australianos -un país en el que dos de cada tres adultos sufren sobrepeso u obesidad- determinaron que la pérdida de peso alcanzada era de siete kilos de media por participante.