A los 28 años, “Cáncer” no era una palabra que esperaba escuchar. Era solo un chequeo de rutina. Pero los médicos me encontraron un nudo en la garganta y esa palabra pasó a formar parte de mi historia. Pasé incontables horas en tratamientos de radiación y, eventualmente, en cirugía. Hoy, puedo llamarme sobreviviente de cáncer.
Esta fue mi primera clase de actuación después del diagnóstico y el tratamiento, y ver la cicatriz en mi garganta me recuerda lo bendecida que me sentí ese día, y todos los días desde entonces. Tengo suerte y estoy agradecida de poder compartir mi historia y decir: ¡la prevención temprana es muy importante! Programe su chequeo anual para este año si aún no lo ha hecho. Foto en Instagram sofiavergara
